Árbol líquido: El invento de moda que purifica el aire en ciudades sin espacio para parques
Se le conoce coloquialmente como “árbol líquido” pero es un fotobiorreactor que descontamina el aire concentrando el poder purificador de entre 10 y 50 árboles en un pequeño espacio. Este invento se usa cada vez más en ciudades del mundo, sobre todo en aquellas con poco lugar para áreas verdes.
Los fotobiorreactores usan microalgas que absorben el dióxido de carbono (CO2) de la atmósfera, limpiando el aire de las ciudades y reduciendo los gases de efecto invernadero que estas emiten y que aceleran el calentamiento global.
Este invento comenzó en Serbia y se ha ido extendiendo hacia otras ciudades como Londres o Costa Rica. En Sudamérica, el primer país en desarrollar e instalar árboles líquidos fue Argentina, a través de un proyecto del centro de innovación de la petrolera YPF y el Instituto INBIOTEC.
Para estos sistemas, se usaron microalgas extraídas del sudeste de la provincia de Buenos aires, y se valen de la fotosíntesis que hacen estos organismos, convirtiendo el CO2 en oxígeno. Las microalgas se siembran en una solución líquida que las ayuda a crecer.
Cuando la coloración verde clara del árbol líquido se torna más oscura, significa que el mecanismo ya capturó dióxido de carbono, aumentando la cantidad de microalgas.
La mantención del sistema es simple: Cada mes y medio se debe retirar la biomasa creada, que se puede usar como fertilizante, y cambiar el agua. En el caso del invento argentino, los investigadores buscan reutilizar aguas industriales para reducir aún más el impacto del mecanismo.